Mercancías y turismo
Con el Corredor en marcha, el tráfico de mercancías en el noroeste podría incrementarse desde los 7 millones de toneladas hasta los 20,4 millones. Entonces, el noroeste podría aspirar a mejorar su aportación en generación de negocio por ferrocarril en 2.750 millones de euros anuales, acompañados de las consiguientes mejoras de productividad y reducciones de costes para las empresas tractoras. En ese horizonte, calculado para 2040, la infraestructura a pleno rendimiento podría redundar en una aportación al PIB de 4.500 millones de euros, así como la generación de 23.900 empleos.
Asimismo, el informe también valora del impacto turístico del desarrollo de la nueva red ferroviaria, que permitirá incrementar significativamente esta rama de actividad en el norte de España, al ver ampliado su potencial de captación de clientes del resto de la meseta. Estas regiones han recibido turistas (nacionales e internacionales) que gastan más de 8.300 millones de euros al año. Solo incrementando un 1% la mejora en gasto turístico, gracias al incremento de competitividad, se generarían 116,7 millones anuales de PIB adicionales y se crearían o mantendrían 11.649 empleos al año.
Estas cifras colaborarían no solo a hacer más competitivo el territorio para las empresas ya asentadas o mejorar la capacidad de captación de nuevas actividades, sino que supondrían, también, un impulso casi inmediato a una región en claro retroceso y que debe crear hasta 160.000 empleos netos para igualarse con el resto de España.
Asturias, una nueva puerta al mar para Madrid
En el corto-medio plazo, el impacto anual de la mejoría en la competitividad logística e intermodal asturiana será sustancial solo con la próxima apertura de la Variante de Pajares, la que es, hasta el momento, la mayor obra civil de la historia de España. El incremento del PIB derivado de la mejoría de la competitividad de las empresas se moverá en una horquilla de entre 159,3 y 398,2 millones más gracias a este desarrollo, unos avances que también se podrán transformar en hasta 2.760 nuevos empleos anuales. Sin embargo, la deriva asturiana del informe presentado en la sede de CEOE deja patente que la Variante es solamente una de las piezas, estando la verdadera oportunidad en la extensión del Corredor a todo el cuadrante noroeste, tanto para las empresas del territorio como para las que están instaladas en la meseta.
Hasta el momento, y según las empresas cargadoras consultadas por FADE para la elaboración del informe, el transporte de mercancías por ferrocarril en Asturias tiene tres hándicaps principales: la falta de infraestructuras logísticas, la mala gestión intermodal y la escasez de frecuencias. El desarrollo del Corredor, tal y como está planteado hasta el momento, resolvería los problemas actuales, pero también abriría una nueva ruta de salida a los hubs europeos para todas las empresas de la meseta.
Así, FADE ha reiterado sus peticiones para el desarrollo del plan director del Corredor Atlántico, resumidas en tres puntos:
- En primer lugar, una total integración de Asturias y sus centros urbanos como nodo logístico del noroeste de España e integración en el Corredor Atlántico de Red Transeuropea de Transporte. Así, será necesario el desarrollo en alta velocidad de los tramos pendientes, Pola de Lena- León y los trazados interiores que conectan con los puertos, así como la actualización de las estaciones de Oviedo y Gijón.
- En segundo lugar, convertir ZALIA (Zona de actividades logísticas de Asturias) en un enclave de primer orden en cuanto al transporte y la distribución, tanto en el ámbito regional y nacional, como a nivel internacional y estar conectada con el Corredor Atlántico. Es necesaria la conexión ferroviaria a la ZALIA con los puertos de Gijón y Avilés y la disposición de una estación intermodal que permita el trasvase de mercancías entre la carretera y el ferrocarril.
- Y, en tercer lugar, una inversión que dé un impulso a los puertos y recupere las conexiones marítimas con los principales puertos de la fachada atlántica.